Yecla (Murcia), 11 jul (EFE).- El juez ordenó sobre las 13.30 horas de hoy el levantamiento de los cadáveres de los cuatro miembros de la familia que murió esta mañana en el paraje yeclano de la Herrada del Manco, después de que J.P.V. asesinara con un arma blanca a su esposa y a su dos hijos y se disparara con una escopeta.
Según uno de los vecinos de la zona, se trataba de una familia "noble", y eran personas "muy formales que daban una impresión fabulosa".
Los vecinos de las viviendas que circundan la casa unifamiliar donde se produjo el asesinato múltiple relataron que habían escuchado tres disparos "como tres cohetes", pasadas las 9 de la mañana.
Algunos testimonios hablan del presunto autor de los asesinatos como un hombre muy trabajador que se había dedicado a la albañilería y a la pintura y había trabajado también en la industria del mueble, el sector más importante del municipio.
Un vecino, José Rodríguez, señaló que la familia llevaba viviendo en ese chalet, construido por el presunto autor de los hechos, unos 17 años.
En cuanto a la mujer asesinada, algunos vecinos indicaron que era ama de casa, llevaba y recogía a los niños del colegio y solía hacer deporte por los alrededores del municipio por la mañana y por la tarde.
El cordón establecido por la Guardia Civil y la Policía Local de Yecla en torno al lugar de los hechos se abrió sobre las 13 horas para dejar pasar a algunos familiares directos de las víctimas.
En la zona donde ocurrió el suceso hay grandes chalets dispersos, algunos con piscina, y campos de almendros y olivos, al pie de una pequeña sierra.
En el chalet contiguo al acordonado viven la hermana del presunto autor de los hechos y su marido, que fueron atendidos por psicólogos de Cruz Roja enviados al lugar por el Centro Regional de Coordinación de Emergencias.
La zona se ha llenado de grandes antenas parabólicas de las unidades móviles de las diferentes emisoras de radio y televisión, así como de Protección Civil.
Los cadáveres han sido trasladados al Instituto Anatómico Forense de Murcia para su autopsia. EFE